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_qTomo V
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_qObra completa
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_erda
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_bG215 O131 2008
100 1 _aGarcía Ponce, Juan,
_d1932-2003
_9294
_eautor
245 1 0 _aObras reunidas V :
_bNovelas /
250 _aPrimera edición
264 1 _aMéxico :
_bFondo de Cultura Económica,
_c2008.
300 _a565 páginas ;
_c27 cm
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_atexto
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490 0 _aColección Obras Reunidas.
504 _aIncluye referencias bibliográficas.
505 0 _aInmaculada o los placeres de la inocencia. -- Pasado presente. -- Nota bibliográfica.
520 3 _a"Las obras de Juan García Ponce tocan lo inasible, transcurren siempre en ese espacio donde los contrarios se unen para develar un secreto; se bastan a sí mismas, pues conllevan el signo y su definición. En este volumen se entregan las dos últimas novelas de Juan García Ponce, que son ya, tal vez por esta condición, textos llanos, directos, despojados de ornamentos, en los que se subliman las ideas al exponerlas sólo en el trazo y secuencia de los hechos. Inmaculada o los placeres de la inocencia (1989) es la novela más explícitamente erótica de García Ponce, en la que la celebración de la mujer como objeto se presenta con elocuencia, sin explicaciones ni sustentos más allá de lo evidente. Ya Octavio Paz decía que la palabra inocencia aparece frecuentemente en las obras de García Ponce, 'aliada a esas pasiones que llamamos malas o perversas'. Inmaculada es la encarnación misma de la inocencia, expresada en la necesidad imperiosa del placer que colinda con la perversión y se mantiene intacta precisamente por la falta de una intención premeditada que implique ofensa o deshonestidad. En Pasado presente (1992), García Ponce da rienda suelta a una nostalgia sincera, desprovista de recelo. Es su novela más transparente, su propia búsqueda del tiempo perdido. Parte de la ciudad como personaje para encontrarse y reconocerse en un pasado que se mantiene vivo, porque ya sólo existe en la inmediatez de la obra, ya no hiere ni perturba porque ha encontrado su auténtico sentido, su sitio. La memoria que se muestra exige desapego; uno a uno, los 'héroes' caen para erigirse como hombres verdaderos; los actos memorables se reinterpretan, se vacían de contenidos falsos para revestirse con un nuevo ropaje, acaso más tosco, pero también más cierto. Juan García Ponce se acuerda de recordar; se ve desde afuera, como quiso siempre, a través de la literatura." -- tomado de la contraportada.
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