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100	1		_aBarbolla, Domingo, _d1958- _eautor _95262
245	1	0	_aViolencia invertida : _bCuando los hijos pegan a sus padres /
250			_aPrimera edición
264	3	1	_aEspaña : _bGedisa, _c2011.
300			_a263 páginas : _c23 cm
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490	0		_aColección Psicología Social / Antropología (Gedisa)
504			_aIncluye bibliografía (páginas 262-263).
505	0		_aAgradecimientos. -- 1. ¿Por qué los hijos pegan a sus padres? La violencia como respuesta. -- 2. Una mirada antropológica para comprender las familias de hoy. Los números no hablan. La antropología ausente. -- 3. Construyendo hijos violentos. La lógica del pequeño agresor desde su voz. -- La responsabilidad del entorno familiar y social. -- El hijo violento no nace, "se hace". -- Comprensión y prevención del fenómeno. -- Anabel: "a partir del fallecimiento de mi padre cambié muchísimo". -- Aarón: "mis amigos son como yo, se han criado en la calle". -- Aníbal: "estaba acostumbrado a no tener normas, y claro, llegas a casa". -- Alejo: 2era la culpa de las drogas, me ponía agresivo en casa, en clase, en todos los lados". -- Alicia: "no le pegué ni na, le agarré del brazo y le dije: ¿tú por qué tienes que decir eso de que estoy loca?". -- Amanda: "me arrancó los altavoces del ordenador (..) y pos empecé a insultarla, a empujarla y claro, pues ya de ahí a pegarla tortazos, patás, a empujarla por las escaleras, le di con el machao de los ajos...". -- Andrés: "como me levantó la mano, pos la agarré la mano y la empujé... se cayó y se dio en la mano...". -- Antonio: «tú me has dao pos ahora te voy a dar yo a ti..., ojo por ojo y diente por diente ¿no?...". -- Alfonso: "os voy a mandar a unos amigos míos para que os partan las piernas...". -- Adolfo: "yo cogía cuchillos, jarrones, lo que tenía al alcance de la mano pa defenderme... Si él no me respeta a mí yo no voy a respetarle a él porque no es mi padre...". -- 4. ¿Los padres como víctimas? -- Almudena, madre de Aníbal: "lo hemos soportado bastante". -- Araceli, madre de Anabel: "mi vida ha sido una lucha y lo sigue siendo". -- Ángela, madre de Alicia: "como empezó con 13 años tampoco me aceptaban denuncias (...) y ahí he vivido un año y pico de infierno". -- Adela, madre de Andrés: "me tenía como acobardá porque yo le tenía miedo y cuando ha estao aquí le tengo miedo...". Amparo, madre de Ainara: "...ella dice que no soporta estar mucho conmigo...". -- Aurora, madre de Adolfo: "no pude más, ya lo denuncié... ¡Uf!, es mu duro... Es como si estuvieras cometiendo un delito tú...". -- 5. Entonces, ¿qué hacer? -- Romper la lógica de hijos biológicos e hijos naturales. -- Considerar la multicausalidad en las formas de rebelión filio-paternal. -- Valorizar la singularidad de la experiencia... -- 6. Bibliografía.
520	3		_a""Violencia invertida. Cuando los hijos pegan a sus padres" muestra una investigación desde el ámbito de la antropología, sociología y psicología social que trata de explicar el fenómeno social de la violencia filioparental cada día en aumento en nuestra actual sociedad. La violencia en el seno familiar ejercido de padres a hijos es una práctica reconocida y normalizada en casi todas las culturas del planeta, si bien desde la dirección del infante es un nuevo escenario al que nos enfrentamos. Los análisis hasta ahora encontrados ponen de manifiesto la ausencia de valores que "sufre" la sociedad de nuestro tiempo o el deterioro de los mismos en el seno familiar. Descontrol, falta de autoridad, exceso de libertad en este microcontexto suelen ser reconocidos como causantes de tal violencia, cuando no las drogas u otras variables "malditas". Este libro ofrece una lógica alternativa, pues pone de manifiesto causas estructurales en la organización de nuestra sociedad. Familias superreducidas, ausencia de figuras paternas y mediadoras de conflictos como hermanos, tíos, primos, vecinos, sacerdotes. Por otra parte, tendemos a gestionar los conflictos a través de instituciones como la policía, jueces y sistema penitenciario. Las voces de los actores del drama —padres e hijos agresores— nos muestran esta ritualización de la escenografía social contemporánea. Nos encontramos, por tanto, ante una consecuencia de nuestro "estilo de vida", añorando la lógica violenta de los que siempre han detentado la autoridad agresora: los padres. Un nuevo apunte pone en evidencia el texto, los hijos adoptivos tienen muchas más posibilidades de ejercer la violencia hacia sus nuevos padres que los biológicos... ¿dónde está su lógica?" --tomado de la contraportada.
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