Producciones Kim Jong-II presenta... : La increíble historia verdadera de Corea del Norte y del secuestro más osado de todos los tiempos / Paul Fischer ; traducción de Ferran Esteve.

Incluye referencias bibliográficas.

Nota acerca de las fuentes, el método y los nombres. -- El reparto. -- Introducción: Agosto de 1982. -- PRIMERA BOBINA: LA LLAMADA DEL DESTINO. 1. Una instantánea en el jardín de la Casa Azul, 2. El director Shin y Madame Choi, 3. Una gamba entre ballena, 4. Un doble arcoíris sobre el monte Paektu, 5. Los primeros amores de Kim Jong-I, 6. Padres e hijo, 7. Los secretos del gran espectáculo de Pyongyan, 8. Un beso de tres segundos, 9. Repulse Bay. -- SEGUNDA BOBINA: HUÉSPEDES DEL AMADO LÍDER. lo. El Reino Ermitaño, 11. Acusado, 12. Musicales, películas y estudios ideológicos, 13. Secuestrado, 14. Los otros, 15. La huida del valle de los Castaños, 16. Aquí murió Shin Sang-Ok, 17. La posición de tortura, 18. División 39, 19. La huelga de hambre, 20. Va a venir el director Shin. -- ENTREACTO: WOO IN-HEE, LA ACTRIZ DEL PUEBLO. TERCERA BOBINA: UNA PRODUCCIÓN DE KIM JONG-IL. 21. Juntos, 22. La grabadora, 23. Luces, cámara..., 24. Lejos del norte, 25. Como una película europea, 26. La rueda de prensa, 27. La misma cama, otros sueños, 28. Una agenda plagada de rodajes, 29. El monstruo de goma, 30. Viena, 31. De Kim a Kim, 32. Barras y estrellas. -- Epilogo: 2013. -- Postfacio. -- Agradecimientos. -- Bibliografía escogida.

"Antes de convertirse en el dictador más famoso del planeta, Kim Jong-Il dirigía el Ministerio de Propaganda de Corea del Norte. Desde allí, informado como estaba de la relación entre política y espectáculo, concebía, escribía y producía todas las películas norcoreanas, las únicas que podían verse en el país. Y allí sufría además la comparación que él mismo hacía de sus cintas con los blockbusters estadounidenses que tanto admiraba y que, como todas las producciones de Occidente, pirateaba para su particular y exclusivo consumo. La industria fílmica del vecino del sur también era motivo de admiración y piratería, pero sobre todo lo era de envidia, poderosa fuerza gracias a la cual el Amado Líder dio con el recurso ideal para la industria nacional: el secuestro de la actriz más famosa de Corea del Sur y de su exmarido, el más aclamado director de cine del otro lado de la frontera. Juntos iban a producir una de las películas más denostadas y celebradas de la historia, Pulgasari, una de esas cintas que, por fortuna para ellas mismas, merecen la calificación «de culto» antes que cualquier juicio de valor, y cuya «increíble historia verdadera» ha dado material a Paul Fischer para escribir un thriller comparable a los mejores libros del género." tomado de la contraportada.